Zapatilla Hoka One One Bondi 6: amortiguación y confort
La zapatilla de running Hoka One One Bondi 6 para hombre con pisada neutra, te proporciona una excelente amortiguación y un máximo bienestar en tus salidas en asfalto.
El upper de la sexta versión del modelo Bondi cuenta upper de mesh transpirable y sin costuras para que disfrutes de un óptimo confort kilómetro tras kilómetro. Los estampados 3D te aseguran una mayor durabilidad. La Lengüeta acolchada Confort Frame te asegura un ajuste cómodo y seguro.
Su entresuela Oversize de EVA junto al diseño curvado en la zona del metatarso, te ofrecen una excepcional amortiguación y favorecen una pisada más fluida, estable y natural.
Gracias al nuevo diseño de su suela con ranuras de flexión en toda la suela, la zapatilla Hoka One One Bondi 6 le brinda un mayor dinamismo a tus zanacadas.
Ventajas de la zapatilla Hoka One One Bondi 6
*Pesado por el equipo especializado de i-Run
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Desarrollo natural de la pisada: la geometría de la mediasuela, diseñada específicamente con un diferencial (drop) entre talón y antepié bajo, y el perfil curvado bajo los metatarsos favorece un efecto pivotante único.
Ventaja:
Se adapta a la morfología natural del corredor y estimula una pisada continua y natural desde el impacto hasta el impulso.
Entresuela con un diseño que multiplica por 2,5 veces el volumen de EVA en comparación con los estándares de las zapatillas de running convencionales. Ofrece una absorción de impactos única, al igual que una sensación de comodidad bajo el pie. Este diseño sobre-dimensionado favorece una pisada natural tanto en carreteras lisas como en terrenos accidentados.
La geometría Meta-Rocker se caracteriza por un diseño específico de la entresuela con baja diferencia de altura entre el talón y la punta, además del relieve en la entresuela en las zonas del talón y los dedos para crear un efecto de punto de apoyo único que guía el ciclo de la pisada.
La geometría de la entresuela con un perfil curvado bajo los metatarsianos ha sido diseñada para reducir la fatiga y favorecer el desarrollo adecuado de la pisada en todas sus fases. La geometría curvada comienza lo más lejos posible del empeine, con una zona de transición ubicada delante de las cabezas metatarsianas. Ofrece una base más estable debido a un mejor soporte bajo los metatarsianos.